jueves, 14 de julio de 2011

9
“Toneladas de amor.”

Un día. El último de clases antes del receso invernal. Toda una bendición. Todo era más lindo. A pesar de que todo el paisaje era seco, ya ni siquiera las hierbas resistían a los intensos vientos que soplaban por las noches invernales. Sin embargo, todo estaba bien. No existían preocupaciones. Habían desaparecido junto con los estudios.
__¿Qué harás estas vacaciones? __Le preguntó Lucy a Rooney, ayudándola a sostener sus libros mientras esta abría su casillero.
__ De viaje, seguramente. ¿Y tú?
__ No lo sé. Creo que me quedaré aquí. Mi hermanito está a punto de nacer.
Rooney sonrió. Se había olvidado de este último detalle. Mientras comenzaban a caminar por el corredor, le preguntó:
__ ¿Emocionada?
__ Claro. No seré más hija única. __Le respondió esta devolviéndole la sonrisa.__ Siempre quise tener hermanitos… ¿Tú no?
__Con dos me basta, gracias __Contestó Rooney riendo.
__ Es horrendo ser única hija. Si alguna vez tengo hijos, tendré muchos.
__ ¿Con Trace? __Rió nuevamente Rooney.
Lucy la empujó riendo. Ambas sabían que Lucy volvía a estar enamorada de Trace, aunque él ni siquiera lo supiera. Ambas se pasaron el brazo por atrás del hombro de la otra. Salieron así hasta el patio, donde se hallaba todo el colegio, en el descanso. Las dos chicas continuaron caminando, y se les sumó George.
__Hola, chicas __La saludó__ ¿Van para el comedor?
__ Sí __Contestó Rooney. De repente enfocó su mirada hacia un pergamino que el chico traía en su mano__ ¿Qué tienes ahí?
__ Nada, cosas mías. __ Quiso evadir el tema.
Ambas lo miraron desafiantes. El comprendió del inmediato el mensaje, e intentó esquivarlas, pero las chicas no le dieron tiempo: se le abalanzaron. Transcurridos unos segundos de confusa lucha, lograron quitarle aquel dichoso papel.
Sentadas arriba de George (aplastándolo) las chicas desenrollaron el papel. Lucy y Rooney encimaron sus cabezas para ver mejor. Se encontraron con una canción. Y no cualquier canción. Era de amor.
__ ¿Para quién escribes? __Le preguntó Lucy tendiéndole la mano para ayudarlo a ponerse de pie nuevamente.
George, con un poco de culpa, resentimiento y enojo porque las chicas se hubieran salido con la suya, escudriñó una respuesta.
__ Para Lisa.
__ ¿Otra vez con eso…?
__No. No es que me guste, tan sólo… estaba aburrido.
Lucy y Rooney se observaron la una a la otra con una mirada que lo decía todo. Ambas sabían la verdad, y George era pésimo disimulando. Les había jurado y prometido millones de veces que se la iba a sacar de la cabeza, pero ahora parecía volver a caer en el juego. Lisa era el amor platónico de George desde que tenían memoria. Ella era… un tanto estúpida, y actualmente, la mejor amiga de Amy.
__ George, esa chica tiene menos en la cabeza que cualquiera de nosotros. Y lo sabes.
__Sí…
__Y es una caprichosa, consentida. Te volverá loco.
__ Lo sé…
__ No sólo lo volverá loco si está con él. Ella se hace rogar. Hasta conquistarla, lo hará enloquecer__ Agregó Rooney.
__ ¿Qué sucede aquí? __Llegó John, junto con Trace.
__Nada __Se apresuró a contestar George haciendo muecas exageradas a las chicas, quienes le sacaban la lengua en gesto de burla.__ ¿Vamos a comer, quieren?
Trace y John se miraron con cara de no saber nada, pero se encogieron de hombros y caminaron junto con los demás.
__ ¿Cómo creen que me quedará el uniforme de soccer de los Lions de Brossard? __Preguntó George.
__ ¿Allí es donde irás de vacaciones…? __Preguntó Rooney.
__ Sí. Mi padre compró una casa de veraneo allí. Veraneo es un decir. Nevará toda la temporada.
__Podrás patinar en la piscina __Se burló Trace.
__ ¿Y qué hay de ti, Trace? ¿Qué harás estas vacaciones? __Le preguntó intrigada Rooney.
__Me quedo aquí. Papá no pudo conseguir ninguna cabaña en los centros de ski. Están repletas.
De pronto, Rooney miró a Lucy. Ambas abrieron los ojos como huevos, porque sabían lo que eso significaba. Podían sentir el grito de emoción que se desataba en el interior de cada una ¡”Dulces vacaciones”! Seguían caminando.
__Qué coincidencia ¡Lucy también se queda! __Rooney no se pudo contener.
Trace miró a Lucy y le sonrió.
__Supongo que la pasaremos bien.
Lucy le devolvió la sonrisa y escondió el rubor que comenzaba a brotar de sus mejillas con sus libros. Trace no tenía ni idea de cuán enamorada estaba ella. El no tenía idea de todo lo que la hacía sentir. Qué perdido estaba, pensando que sólo lo quería como amigo… él sí que no tenía ni la más remota idea.
Almorzaron todos juntos, y luego se tiraron desde una baja colina al césped. Se quedaron allí, acostados, reposando, pensando en la lúcida idea de que ese era el último día que pasarían todos juntos. Quince días sin verse. Qué locura.
George estaba casi dormido. Rooney apoyada sobre John, cerraba los ojos mientras este la abrazaba. Lucy se sentía un poco frustrada, al lado de Trace sin que pase nada. Echaba de menos el tiempo en que estaban juntos, y cada vez se daba más cuenta de que lo seguía amando, como desde el principio, o tal vez más aún… es que nunca lo había dejado de amar.
__ Sé lo que piensas __La sorprendió Trace penetrando en su mente__ Yo tampoco quise que las cosas fueran así.
Lucy suspiró.
__Es que me cuesta tanto… serte fiel. Hay cosas que me hacen hervir de la bronca, y no me puedo contener.
Trace se limitó a restregarse los ojos con ambas manos. Lucy tomó la palabra.
__Aunque tal vez no sea la chica perfecta para ti, aunque te dé más problemas de los que imaginaste, aunque tal vez sea una carga, un dolor de cabeza… quiero que sepas que aunque te traicioné, nunca, jamás amé a alguien tanto como a ti. Nunca nadie me hizo sentir todas las cosas que me hiciste sentir. Nunca nadie me hizo reír tanto como tú me hiciste reír. Nunca nadie le dio tanto sentido a mi vida como tú le diste. Me siento mal, siento un nudo en mi corazón, un vacío que sólo tú podrás llenar, Trace. Y esos besos que les di a otros, podrán haber sido besos excelentes, lo admito. Pero ningún beso jamás será tan hermoso como el tuyo. Ninguna boca podrá igualarte jamás. Los besos que les di fueron besos vacios, de furia, bronca o descargue. Eres el amor de mi vida, ¿Tanto te cuesta entenderlo? Pero ya no te merezco. Ahora puedo ver con claridad, que por todos esos errores míos que tan mal te hicieron, estoy pagando mi culpa. Ya no podré volver a estar contigo nunca más.
Una pausa se hizo entre los dos.
__ Qué bueno que te hayas dado cuenta. Has crecido mucho __Respondió Trace, y Lucy se sintió reconfortada de que su amigo la entendiera. Ya no volverían a estar juntos jamás. Ella ya no necesitaba de él. Ya había aprendido a crecer por su cuenta.



FIN :D

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